Pasear por las calles iluminadas, descubrir prestigiosos museos, escaparse a tomar un café en una terraza... A París nunca le faltan ideas para pasar un fin de semana de éxito. Para un Estancia en París El Hôtel Londres Saint-Honoré, idealmente situado en el corazón del distrito 1, le ofrece confort y elegancia. Estará a un tiro de piedra de algunos de los monumentos, galerías de arte y animados barrios más bellos de la capital.
Descubra los imprescindibles de París en un fin de semana
Tanto si visita París por primera vez como si redescubre la capital, hay una serie de monumentos y lugares que no debe perderse. Forman el alma de París y son accesibles todo el año.
Torre Eiffel y Campos de Marte
Símbolo universal de París, la Torre Eiffel se eleva 330 metros sobre la ciudad. Construida para la Exposición Universal de 1889, puede visitarse de día y de noche, y ofrece una vista ininterrumpida de la capital. A sus pies, los Campos de Marte ofrecen amplios prados ideales para un picnic o un paseo, en verano o en invierno.
El Museo del Louvre y sus colecciones permanentes
Antiguo palacio real, el Museo del Louvre alberga más de 35.000 obras en exposición permanente, que abarcan varios milenios de historia y civilización. Podrá admirar la Gioconda, la Venus de Milo o la Balsa de la Medusa. Incluso sin entrar, su pirámide de cristal y sus patios monumentales bien merecen una visita.
Catedral de Notre-Dame e Île de la Cité
Obra maestra gótica del siglo XII, Notre-Dame de París sigue siendo un monumento emblemático, visible y visitable en sus alrededores a pesar de las obras de restauración. La Île de la Cité, cuna histórica de París, ofrece la oportunidad de retroceder en el tiempo paseando por sus callejuelas y puentes.
Arco del Triunfo y paseo por los Campos Elíseos
Erigido a petición de Napoleón I, el Arco del Triunfo rinde homenaje a los ejércitos franceses. Su terraza panorámica ofrece una de las mejores vistas del eje histórico que une el Louvre con el Gran Arco de la Défense. Más abajo, la avenida de los Campos Elíseos invita a pasear por sus tiendas, jardines y cines.
Pasear por los barrios más bonitos de París
La mejor forma de conocer París es a través de sus barrios emblemáticos, donde cada calle cuenta una historia y cada paso revela un aspecto diferente de la ciudad. Aquí tiene cuatro distritos imprescindibles para un paseo lleno de encanto, cultura y patrimonio.
Le Marais
Antiguo pantano transformado en barrio aristocrático ya en el siglo XVII, el Marais es hoy uno de los conjuntos urbanos más antiguos y fascinantes de París. Sus calles adoquinadas albergan mansiones privadas, patios ocultos y fachadas renacentistas que han resistido el paso del tiempo. La Place des Vosges, primera plaza real de París, es la perfecta encarnación de este encanto histórico. Para un paseo más confidencial, aventúrese en el Village Saint-Paul, con sus galerías de arte, tiendas de antigüedades y sombreados pasajes. Y en la rue des Rosiers, encontrará un ambiente cálido y tradicional, a menudo peatonal los domingos, reflejo de un París auténtico y animado.
Montmartre
Encaramado en una colina al norte de París, Montmartre encarna el espíritu bohemio y artístico de la capital. Sus calles estrechas y empedradas conducen a la famosa basílica del Sacré-Coeur, y es aquí donde se pisan las huellas de Monet, Renoir y Degas, mientras los artistas exponen sus obras en la Place du Tertre. Este ambiente de pueblo también puede descubrirse en las callejuelas secretas, con sus discretas escaleras y jardines íntimos. El funicular facilita el acceso a la cima, por lo que podrá admirar las vistas evitando las escaleras de la rue Foyatier.
Saint-Germain-des-Prés
Saint-Germain-des-Prés, barrio literario y chic de la Margen Izquierda, ofrece un ambiente elegante, con cafés a la antigua usanza y librerías refinadas. Pasee por sus bulevares, repletos de terrazas, galerías de arte y boutiques de lujo, en un ambiente a la vez cultural y sofisticado.
Canal Saint-Martin
El Canal Saint-Martin merece una mención como paseo relajante y atemporal: bordeado de árboles, puentes, tiendas de comestibles y cafés bohemios, personifica el París bohemio y "bobo", perfecto para relajarse junto al agua entre paseo y paseo por la ciudad.
Disfrutar de espacios verdes y paseos al aire libre
En París abundan los paraísos verdes y los paseos tranquilos, perfectos para escapar del bullicio del centro de la ciudad en cualquier época del año. He aquí cuatro lugares emblemáticos, siempre accesibles e ideales para relajarse, pasear o mantenerse activo.
Jardines de las Tullerías
Situado entre el Louvre y la Plaza de la Concordia, el Jardín de las Tullerías es uno de los mayores jardines públicos de París, con una extensión de 28 hectáreas. Verdadero museo al aire libre, está adornado con numerosas estatuas -obras de Maillol, Rodin y Giacometti- diseminadas entre los senderos y estanques. Es el lugar perfecto para dar un paseo combinando arte y naturaleza, o para regalar a los niños un momento lúdico en las zonas de juegos.
Jardines de Luxemburgo
En el corazón del distrito 6, el Jardín de Luxemburgo ocupa casi 23 hectáreas. Creado en 1612 por Marie de Médicis e inspirado en los jardines de Boboli, ofrece una inteligente mezcla de jardines formales, zonas arboladas, un gran estanque y una zona de bosque geométrico. Los parisinos vienen aquí a jugar al ajedrez o al tenis, o a admirar la fuente de los Médicis y las famosas maquetas de barcos en el Grand Bassin.
Las orillas del Sena
Las Berges de Seine, una nueva zona peatonal a lo largo del río, ofrece un paseo agradable y accesible desde la Place de la Concorde hasta el Hôtel de Ville. Alternando pasajes sombreados, lugares de descanso y miradores emblemáticos, es un itinerario por la historia y el corazón vivo de la capital.
Bosque de Vincennes
Al este de París, el Bosque de Vincennes es el mayor espacio verde de la ciudad, con casi 995 hectáreas. Antiguo bosque real transformado en el siglo XIX, ofrece una diversidad de paisajes y actividades: lagos, arboreto, parque floral, zoológico, teatro e incluso alquiler de barcos. Es el lugar ideal para una escapada bucólica lejos del bullicio de París.
Experiencias parisinas todo el año
Además de sus monumentos, París ofrece experiencias únicas que pueden disfrutarse en cualquier época del año y permiten descubrir la ciudad de una forma totalmente nueva.
Crucero por el Sena
Un crucero por el Sena es una de las formas más poéticas de descubrir París. Desde el barco podrá ver la Torre Eiffel, el Louvre, Notre-Dame y muchas otras joyas arquitectónicas. Estos viajes están disponibles todo el año, y algunas compañías ofrecen incluso barcos con calefacción en invierno.
Subida a la Torre Montparnasse
Menos conocida que la Torre Eiffel, la Torre Montparnasse ofrece una de las mejores vistas panorámicas de París. Desde su terraza de 210 metros de altura se puede contemplar todo el skyline de la ciudad en una sola vista, con la Torre Eiffel de fondo.
Descubrir los mercados parisinos
Los mercados forman parte de la vida cotidiana de París. Del Marché d'Aligre al Marché Maubert, encontrará productos frescos, flores, especialidades regionales y artesanía. Estos animados lugares están abiertos todo el año y reflejan la diversidad culinaria de Francia.
Crucero en bateau-mouche o barcaza restaurante
Para combinar gastronomía y descubrimiento, un crucero con cena por el Sena es una experiencia inolvidable. Durante el día, también podrá disfrutar del sol y el bullicio del muelle en las barcazas con terraza.
Ideas para actividades de temporada
Cada estación aporta a París un ambiente especial, ofreciendo actividades que se adaptan a las condiciones y al estado de ánimo del momento.
En verano: terrazas, gabarras y picnics a orillas del agua
Los días más largos invitan a sentarse en una terraza, hacer un picnic junto al Sena o en uno de los grandes parques. Los cruceros de verano y las guinguettes al aire libre son ideales para disfrutar del suave aire nocturno.
En otoño: paseo por los jardines dorados
El Jardin du Luxembourg, el Parc Monceau y Buttes-Chaumont se engalanan con tonos cálidos y ofrecen el telón de fondo perfecto para paseos contemplativos.
En invierno: iluminaciones y mercados navideños
Desde mediados de noviembre hasta principios de enero, las calles y monumentos se iluminan. Los mercados navideños ofrecen adornos artesanales, especialidades regionales y un ambiente festivo.
Primavera: paseo por los parques en flor
Los cerezos del Parque de Sceaux, las magnolias de los jardines de París y los parterres del Parque Floral anuncian el regreso del buen tiempo y los paseos alegres.
Salir por la noche en París
Cuando cae la noche, París revela una faceta diferente de su personalidad: elegante, festiva, romántica o íntima, según le apetezca. La oferta nocturna es variada y se adapta a todas las estaciones.
Cena en un restaurante gastronómico o bistronómico
París cuenta con un impresionante número de restaurantes donde la cocina es un arte. Desde restaurantes con estrellas Michelin hasta bistrós contemporáneos, la ciudad ofrece una diversidad de sabores y estilos. Tanto si desea saborear la alta cocina francesa como descubrir cocinas de todo el mundo, distritos como Saint-Germain-des-Prés, el Marais o la Ópera albergan multitud de direcciones de renombre. Las terrazas climatizadas permiten incluso comer al aire libre en invierno.
Representaciones teatrales o de ópera
Por la noche, París cuenta con una rica y permanente oferta cultural. La Ópera Garnier y la Ópera Bastilla acogen ballets, óperas y conciertos durante todo el año. Los teatros, ya sean institucionales como la Comédie-Française o más íntimos, ofrecen obras clásicas, comedias y creaciones contemporáneas. Es una forma estupenda de sumergirse en la vida cultural local.
Paseo nocturno por el Sena y sus monumentos iluminados
París de noche es un espectáculo en sí mismo. Los monumentos emblemáticos de la ciudad, desde la Torre Eiffel hasta el Hôtel de Ville, se iluminan al caer la noche. Un paseo por las orillas del Sena ofrece vistas espléndidas y ambientes cambiantes, desde el bullicio de los muelles hasta la calma romántica de los puentes. Para disfrutar de una vista única, suba al Arco del Triunfo al anochecer para admirar el resplandor de los Campos Elíseos.
Cabarets y locales legendarios
Algunos cabarets parisinos son auténticas instituciones, célebres por sus espectáculos que combinan música, danza y una puesta en escena espectacular. Encarnan el espíritu festivo y glamuroso de la capital. Es una experiencia típicamente parisina, a menudo acompañada de una cena, que atrae por igual a visitantes y parisinos.
Consejos para organizar su fin de semana en París
París ofrece multitud de actividades, pero un fin de semana pasa rápido. Una buena organización es la clave para aprovechar al máximo su estancia y evitar contratiempos. He aquí algunos consejos prácticos que le ayudarán a aprovechar al máximo sus días.
Elegir el momento adecuado para visitar los monumentos
Los monumentos y museos más populares, como la Torre Eiffel, el Louvre y el Arco del Triunfo, atraen a un gran número de visitantes, sobre todo a mediodía y los fines de semana. Para evitar las colas, lo mejor es visitarlos por la mañana temprano, nada más abrir el museo, o al final del día, cuando el número de visitantes es menor. Algunos sitios, como el Louvre, ofrecen visitas nocturnas una o dos veces por semana, lo que brinda a los visitantes la oportunidad de descubrir los sitios en un ambiente más tranquilo y a menudo más mágico.
Para los monumentos al aire libre, como Montmartre o los Campos Elíseos, conviene ir por la mañana temprano para disfrutar de una luz suave y un ambiente más tranquilo, o por la tarde para admirar la iluminación de las fachadas y los monumentos.
Utilice el transporte público para desplazarse con facilidad
París está bien comunicada por una densa red de transportes: metro, autobús, RER y tranvía. El metro es el medio más rápido para recorrer largas distancias en la ciudad, mientras que los autobuses ofrecen una agradable visión de las calles y los monumentos. Para una escapada de fin de semana, un billete Paris Visite o un talonario de billetes pueden resultar muy útiles. Si le gusta caminar, muchos de los barrios turísticos de la ciudad están muy cerca unos de otros: por ejemplo, del Louvre a Notre-Dame hay unos 20 minutos a pie. Para desplazamientos más pintorescos, utilice el sistema de alquiler de bicicletas en autoservicio (Vélib') para recorrer el Sena o los barrios con total libertad.
Reservar ciertas actividades con antelación
Para lugares muy frecuentados, como la Torre Eiffel, algunos cruceros por el Sena o los cabarets, la reserva en línea es muy recomendable. No sólo le garantiza su plaza, sino que también ahorra tiempo al evitar colas. Las reservas anticipadas son especialmente útiles si va a venir en períodos de gran afluencia turística (vacaciones escolares, puentes, fiestas de fin de año). Del mismo modo, para restaurantes gastronómicos o espectáculos populares, es mejor reservar con varios días o incluso semanas de antelación.
Planifique según sus prioridades
No se puede ver todo en un fin de semana. Lo mejor es identificar 2 ó 3 "imprescindibles" que no hay que perderse, y luego añadir actividades más ligeras o paseos gratuitos a su alrededor. Por ejemplo, después de visitar el Louvre, planee un paseo por el Jardín de las Tullerías, o después de una tarde en Montmartre, pasee por el Canal Saint-Martin.
Al final de su estancia, tómese un tiempo para perderse simplemente en un barrio que le guste: a menudo es así como se descubren los aspectos más bellos de París, en el recodo de una calle o en una terraza.